“Seraphina” fue escrito por Rachel Hartman y es el primer ejemplar de una dilogía. Pertenece al género de fantasía y ficción adulto/joven, y posee alrededor de 530 páginas. Yo lo adquirí a mediados del 2022 principalmente por su hermosa portada, pero también por su sinopsis que prometía una aventura llena de acción, misterio y algunos toques de romance. ¿Cumplió con esto? 

El libro presenta un universo de fantasía impresionante, debido a que la autora se tomó el tiempo de desarrollar temas políticos; crear una fe religiosa que recuerda un poco a las religiones del mundo real; le dio un pasado histórico a la región donde se ambienta la historia y planteó conflictos raciales entre la población. 

Ciertamente, esto es lo mínimo que se puede pedir de una novela catalogada como “literatura fantástica para jóvenes y adultos”; sin embargo, llevaba tanto tiempo leyendo relatos que ofrecen muy poca información de su universo, que el mundo de Seraphina no tardó en sorprenderme. 

La trama se centra en descubrir quién asesinó al heredero del reino. Desde los primeros capítulos era obvio quién había cometido el crimen, arruinando un poco el misterio. No obstante, lo curioso para mí fue descubrir como se cometió el asesinato y las razones detrás de ello. Igualmente, el argumento se centra en el secreto de Seraphina y de su pasado. Fue interesante conocer un poco de su vida y la de su familia a través de sus recuerdos y los de su fallecida madre. 

La narración es en primera persona y se caracteriza por utilizar palabras propias de la cultura de ese mundo ficticio, que te van explicando conforme vayas leyendo. Si en algun momento se te olvida algún significado, al final del ejemplar cuentas con un glosario para refrescar tu mente. A pesar de ser una obra larga, la manera en como está escrita la hace fácil de leer. 

Respecto a la protagonista, Seraphina es una chica valiente y amante de la música, la cual posee un secreto de gran peso que no le permite desarrollar una vida social “normal”. Por suerte, no es torpe o irritante, como la mayoría de protagonistas de escritos de fantasía (necesitamos más variedad sobre este tema), pero tampoco la adore.

Todos los personajes secundarios están bien construidos, tienen un claro propósito que guía sus acciones y poseen un pasado que motiva sus decisiones. Siempre es agradable leer individuos que no giran en torno al protagonista. El villano no es muy memorable en el mundo de la literatura (apenas tiene unas cuantas apariciones); sin embargo, su plan fue muy ingenioso y cambio por completo la vida de los personajes.

Ocurren varias muertes que logran mover la trama y crear un punto de clímax, mas no provocan un impacto emocional en el lector. Por otro lado, se plantea un romance entre Seraphina y el príncipe Lucian. Pese a que considero que ambos tienen buena química, este amorío se desarrolló de manera muy rápida. Apenas tuvieron algunas interacciones y ya los dos estaban enamorados. 

Los dragones de este libro son muy diferentes a lo que estamos acostumbrados, ya que en la historia son seres sin emociones (como los reptiles) y tienen la capacidad de transformarse en un humanoide, en consecuencia los hombres sienten total desconfianza y odio por ellos. Además, tienen su propia “civilización” y reglas. Por lo que esta obra consiguió que los dragones pasarán de ser bestias que el héroe debía derrotar, a ser seres intelectuales. Este cambio es muy original y no me desagrado. 

A su vez, existen los mestizos, una raza desconocida y repudiada por quienes tienen conocimiento de ella. Estos individuos poseen partes humanas y partes de dragón que intentan esconder de la sociedad. También son capaces de conectarse a través de un lugar ubicado en la mente, donde cada mestizo tiene un espacio propio y puede interactuar con los demás, permitiendo el desarrollo de pequeños juegos mentales. Lo único que no me gustó de esto es que nunca explicaron las razones de esta destreza; sin embargo, tal vez lo hagan en la próxima entrega de la saga. 

En conclusión, no es una historia perfecta, pero sí bastante entretenida, que logró engancharme lo suficiente como para querer leer el próximo ejemplar.