Desde hace unos meses, debido a una materia en la universidad, he tenido ganas de ver filmes que tratan sobre acontecimientos que afectaron al mundo durante el siglo 20. Esta fue la manera en la que llegué a esta película, la cual cuenta la historia de la "Operación Cartago" que fue llevada a cabo en marzo de 1945 durante la Segunda Guerra Mundial.

Esta operación militar fue ejecutada por la Real Fuerza Aérea Británica y tenía como objetivo bombardear uno de los cuarteles generales de la Gestapo (un grupo de policías nazis), que estaba ubicado en Copenhague, Dinamarca. Desafortunadamente, por culpa de un accidente aéreo, varios bombarderos también atacaron por error la sede de una escuela católica, causando la muerte de 125 civiles. 

Cuando terminé de ver esta cinta pensé en redactar una reseña, pero descarté la idea debido a que no tenía ni idea de como escribir acerca de “Una sombra en mi ojo”. Actualmente, sigo sin saber que decir; sin embargo, quiero que más personas la vean y espero que con esta crítica, pueda lograrlo. 

Nunca una película me había conmovido tanto. Hubo momentos que me dejaron impactada y me sacaron más de una lágrima. 

La historia sigue el día a día de un grupo de personas que habitan en la ciudad de Copenhague: varios niños, monjas, nazis, padres y políticos. La mayoría no se conocen, pero sus vidas quedan entrelazadas para siempre, luego de que la primera bomba cayera sobre la escuela católica Institut Jeanne d’Arc. 

Que la película tenga una gran variedad de personajes me permitió ver la Segunda Guerra Mundial desde diferentes perspectivas y cómo la situación mundial afectaba el estado mental de la población. Usualmente, no me gusta que las producciones cinematográficas tengan tantos personajes; no obstante, en esta ocasión este elemento jugó a su favor.

De igual forma, dada a la cantidad de protagonistas, hay varias subtramas, y aunque algunas se desarrollaron más que otras, al final todas se complementaron a la perfección. Ninguna de estas mini historias sobrecargaron, ni opacaron la trama principal, al contrario, le aportan más sabor a la cinta. 

Realmente, creo que es por estas subtramas que el filme me gustó tanto, ya que lograron que me encariñara con los personajes.

Las actuaciones son increíbles, me atrevería a decir que más de una es digna de un premio. Me dejó impresionada la interpretación de los niños, tenían el reto de realizar papeles realmente complejos y aun así, lo hicieron excelentemente. 

Los planos cinematográficos complementaron la interpretación de los actores, ayudándolos a transmitir esa angustia e impotencia. Definitivamente, esta cinta fue hecha con mucho cariño y dedicación. 

El final fue muy bien ejecutado, los guionistas supieron cómo jugar con las emociones del espectador hasta los minutos finales, intrigándonos con el destino de varios protagonistas. La última media hora tuvo escenas poderosas que me causaron muchas emociones.

En conclusión, esa noche que andaba aburrida, encontré en Netflix una de las mejores películas que he visto. Si no te desagradan las escenas gráficas y violentas, realmente tienes que verla. 

Nunca antes había escuchado hablar de la "Operación Cartago" y de todas las vidas que se llevó, ahora no olvidaré esta historia.

- Dani23